Lección 6—Un canto de temor

Shakespeare se imaginó a Julio César discutiendo con su esposa Calpurnia, que trataba de disuadirlo para que no fuera al senado el idus de marzo:

Los cobardes mueren muchas veces antes de morir,

El valiente jamás prueba la muerte sino una sola vez.

De todas las maravillas que he oído,

Me parece la más extraña que los hombres teman,

Viendo que la muerte, un fin necesario,

Vendrá cuando quiera venir.

El temor hace cosas extrañas con la gente. Puede crear un cobarde o un héroe, porque prepara a la misma persona para huir o para luchar con una sola descarga de adrenalina. Pone al descubierto la médula del carácter de uno y lo expone mientras todas las máscaras sociales normales quedan a un lado. Mire a un hombre o a una mujer cuando tiene miedo y verá a la persona real. César ignoró precipitadamente las precauciones razonables.

La gente hace cosas extrañas con el temor. Usted aprende mucho en cuanto a alguien al observar lo que teme. Algunas personas le temen a todo. Se imaginan los peores resultados de cualquier acontecimiento inesperado y lo anticipan con temor. Algunas personas parecen no temer a casi nada, y disfrutan de la recreación físicamente peligrosa. La mayoría de las personas experimentan temor en ocasiones de peligro para sí mismas o para sus seres queridos, y en tiempos de gran incertidumbre acerca del futuro.

Los salmistas no fueron inmunes al temor, y no se avergonzaron de hablar con Dios al respecto ni de invitar a otros a unírseles para clamar a Él por ayuda. No debemos ignorar el temor, como César, ni tampoco debemos tener temor de temer. Debemos acudir a Dios. No debemos vivir la vida cobardemente, detestándonos nosotros mismos por timidez. Debemos confiar en Dios lo suficiente como para atrevernos a servirle. Debemos temer sólo al Dios Todopoderoso, confiados en que Él siempre les dice a sus hijos: «No teman».

Un canto de terror

Los dos salmos que usted estudiará en esta sección reflejan los terrores y lugares escabrosos en las vidas del rey David y de Hernán, un cantor de la corte de Salomón. Estos hombres no eran llorones, ni les asustaban sus propias sombras. Fueron individuos poderosos que enfrentaron situaciones prolongadas que amenazaban sus vidas. Fueron hombres reales que reconocieron su necesidad del Señor para lidiar con el temor.

Salmo 55

¿Cómo sentiría David que Dios estaba reaccionando a su continua súplica? (v. 1)

¿Cómo caracterizó David su campaña de oración? (v. 2)

El versículo 3 resume el problema que le producía el temor a David. ¿Qué es, y cómo explica esto su incansable oración?

¿Cómo era este continuo tiempo de temor para David? (vv. 4, 5)

¿Cuál fue su respuesta humana al temor? (vv. 6–8)

Los versículos 9–11, 15, 19–21 y 23 contienen las oraciones de David pidiendo venganza.

¿Qué hizo de la peligrosa situación de David, especialmente dolorosa, tan aterrorizante? (vv. 12–14)

¿Qué le prometió David al Señor y cuál fue su confianza, aun cuando sus oraciones parecieran gemidos incesantes? (vv. 16–18)

¿Cuál es el consejo espiritual de David a cualquiera que enfrente la traición y el terror? (v. 22)

¿Qué declara David que haría cuando el terror pasara y sus atormentadores fueran juzgados? (v. 23c)

Salmo 88

Probablemente el más pavoroso canto del corazón, en los Salmos, es el Salmo 88, compuesto por Hemán ezraíta. Aparte de un rayo vital de esperanza, que usted descubrirá en su estudio, el terror de Hemán es espantoso.

Por ahora, habrá notado que muchos de los salmos se acercan a Dios inicialmente de la misma manera. ¿Qué pide Hemán en los versículos 1, 2 y 9b?

Mire algunos de los salmos que ya ha estudiado en esta y otras lecciones, y haga una lista de por lo menos cinco que hayan tenido un principio similar.

¿A qué compara Hemán el hecho de vivir con sus temores? (vv. 3–5)

¿Qué le daba esa sensación? (vv. 4, 5, 14–18)

¿Cuánto tiempo se había sentido Hemán de esta manera? (v. 15)

¿Qué responsabilidades le asignó Hemán a Dios por su vida plagada de terror? (vv. 6–9)

A pesar de esto, ¿cuál fue su respuesta a Dios? (vv. 1, 9b)

¿Cuál nombre usa Hemán para dirigirse al Señor? (v. 1) ¿Cómo es este nombre el rayo vital de esperanza en un salmo tétrico?

¿Cómo razonaba Hemán que Dios debía librarle de vivir muerto en sus temores? (vv. 10–12)

¿Cómo podría usar este método al orar respecto a algún problema que parezca consumir su vida?

Fe viva

Cualquier cosa que los salmistas hayan temido, no fueron tímidos para acercarse al Señor. ¿Cómo cambiarían sus oraciones si usted las empezara como los salmistas iniciaban sus cantos?

¿Qué nos previene reconocer nuestros temores ante Dios como lo hicieron los salmistas?

¿Qué nos previene reconocer nuestros temores, en adoración y alabanza, ante otras personas, como lo hicieron los salmistas?

¿Deberían nuestros temores ser un tema de adoración pública? ¿Por qué?

¿Puede un cristiano tener temor y, sin embargo, estar lleno del Espíritu Santo? ¿Por qué?

Un canto de paz

Los tres salmos que estudiará en esta sección revelan la paz que David experimentó conforme el Señor aliviaba sus temores. Los terrores y lugares escabrosos de la vida de David duraron largos períodos de tiempo, pero la paz de Dios continuó siempre y puede ser por siempre para usted también.

Salmo 27

¿Qué características del Señor compensaban los temores de David? (v. 1)

¿Qué cosas le causaron temor a David en el pasado? (vv. 2, 3)

¿Cómo se comparan las fuentes de temor de David con las suyas?

¿Qué les había ocurrido a las fuentes de temor de David? (v. 2)

Durante los años en que el joven David fue perseguido por el rey Saúl y durante el tiempo de la rebelión de Absalón, David estuvo separado del tabernáculo, de los sacrificios y de los festivales anuales. ¿Cómo halló David liberación de sus temores mediante la adoración en el tabernáculo? (vv. 4–6)

¿Cómo le había ayudado el sentir la presencia del Señor a hallar paz en tiempos de temor? (vv. 7–10)

¿Qué papel jugó la Palabra de Dios para prepararle en cuanto a la paz divina en tiempos de temor? (vv. 11–13)

¿Cuál es el consejo final de David para todos nosotros? (v. 14)

¿De qué manera resume el mandato «Espera en Jehová» todo lo que David testificaba en el Salmo 27 que le había ocurrido en su recorrido del temor a la paz?

Salmo 56

          El encabezamiento del Salmo 56 lo ubica al principio de la huida de David de la presencia de Saúl «cuando los filisteos lo prendieron en Gat». Usted puede leer sobre este incidente en 1 Samuel 21.10–15. Debe haber sido un tiempo horrible porque también es el escenario del Salmo 34.

Ocho salmos se identifican como producto de la huida de David de la presencia de Saúl. Son, en el orden probable de su composición: 7, 59, 56, 34, 52, 57, 142 y 54.2 Su concentración en la primera parte de los Salmos refleja que la mayoría, si no todos, los de David, están en las primeras dos secciones del libro (Sal 1–41 y 42–72).

Por sobre todo, ¿qué pidió David a Dios en el Salmo 56? (v. 1)

¿Qué causó el temor de David? (vv. 1, 2)

¿Cómo estaban atacándole sus enemigos? (vv. 5–7)

¿Cómo halló paz David al enfrentar a sus atemorizantes enemigos? (vv. 3, 4, 8–11)

¿Cuál fue la principal percepción de David respecto a la protección de Dios? (vv. 4, 11)

¿Cuál fue el voto de David a Dios? (v. 12)

¿Por qué este voto le pareció razonable a David? (v. 13)

¿Qué quiso decir David cuando señaló que los mortales no pueden hacerles nada a los que confían en Dios? (vv. 4, 11) ¿Le hizo algo Saúl a David? ¿Le hizo algo Absalón? ¿Estaría de acuerdo Job con este salmo? ¿Lo estaría usted?

Salmo 142

Este canto de temor fue escrito por David «cuando estaba en la cueva», de acuerdo a la leyenda al principio del salmo. Hubo dos cuevas en las cuales David se escondió durante la huida de Saúl. El Salmo 142 puede referirse a cualquiera de ellas. Una fue la cueva de Adulam, en la que David se escondió cuando se escapó de Gat y donde reunió a su banda de seguidores (1 S 22.1–5).

El segundo incidente de una cueva fue en En-gadi, en los riscos que se hallan frente al Mar Muerto (1 S 24). Saúl llegó a la entrada de la cueva sin saber que David y sus tropas estaban en su interior. David perdonó la vida de Saúl, y este, temporalmente, dejó de perseguirlo.

El canto de temor de David no fue una oración silenciosa, breve, pronunciada desde una poltrona en una sala. ¿Cómo describió él su oración? (vv. 1, 2) ¿Cómo se lo imaginaría usted actuando mientras oraba en esta cueva?

¿Qué cualidad divina permitía a Dios ayudar a David en su temor? (v. 3a)

¿Cuáles eran los temores de David? (vv. 3b, 4)

¿Cuándo en su vida ha sentido que a nadie le importa su alma? (v. 4d) (Si no ha tenido tal experiencia, explique lo que piensa que David debe haber querido decir.)

Para reemplazar el temor con paz, ¿qué afirmó David en cuanto a Dios? (v. 5)

Para reemplazar el temor con paz, ¿qué le pidió David a Dios que hiciera? (vv. 6, 7a)

Para reemplazar el temor con paz, ¿qué le prometió David a Dios que haría? (v. 7)

Las siguientes cuestiones están modeladas según las tres últimas preguntas respecto al Salmo 142. Respóndalas basándose en todo su conocimiento de las Escrituras y en su experiencia cristiana.

Para que el Espíritu Santo reemplace el temor en su vida con la paz, ¿qué necesita saber y declarar como su testimonio acerca de Dios?

Para que el Espíritu Santo reemplace su temor con paz, ¿por qué necesita orar y qué debería pedirle que haga por usted? ¿Qué promesas le haría en su «confesión»?

Para que el Espíritu Santo reemplace su temor con paz, ¿cómo debería servirle?