sábado, 15 de agosto de 2015

Hijos


El plan de Dios es edificar, fortalecer y proteger a la familia. El plan de Satanás es minarla, debilitarla y destruirla. No hay error: Satanás ha declarado la guerra a la FAMILIA. Trágicamente, muchos de nosotros hemos sido cómplices de él. ¿Por qué? Porque la mayoría de los problemas de nuestra cultura hoy se deben a la ruptura de la familia o de los hogares donde los principios Bíblicos se ignoran o se desobedecen.