LIBRO DE NÚMEROS
(Arameo. Sipra
d΄Minyane. Se traduce Libro de Números. Su autoría se atribuye a Moisés, y su
fecha de redacción se sitúa entre 1450 y 1410 a. C. Es el cuarto libro del
Pentateuco)
Canaán
EXPLICACIÓN:
Canaán es la tierra prometida. Era la tierra que Dios había prometido a
Abraham, Isaac y Jacob: la tierra del pacto. Canaán habría de ser la morada del
pueblo de Dios, apartados para adorar en espíritu y verdad.
IMPORTANCIA:
Aun cuando el castigo de Dios hacia el pecado es por lo general severo, Él
ofrece reconciliación y esperanza, su amor es verdaderamente sorprendente. Así
como el amor y la ley de Dios guiaron a Israel a la tierra prometida, Dios
desea dar propósito y destino a nuestras vidas.
Censo
IMPORTANCIA:
La gente tiene que estar organizada, preparada y guiada para que pueda ser
efectiva en grandes movimientos. Es muy sabio calcular los riesgos antes de
emprender algún proyecto. Cuando estamos conscientes de los obstáculos que hay
ante nosotros, podemos evitar con mayor facilidad los obstáculos que yacen más
adelante. En la obra de Dios, debemos quitar cualquier barrera que pueda
obstruir nuestra relación con los demás para que así nuestra efectividad no se
vea disminuida.
Peregrinaje
EXPLICACIÓN:
Por rebelarse, los israelitas peregrinaron cuarenta años en el desierto. Esto
nos enseña cuan severamente puede Dios castigar el pecado. Cuarenta años bastó
para que todos aquellos que conservaban las costumbres y valores de los
egipcios murieran. Dio tiempo a entrenar a una nueva generación en los caminos de
Dios.
IMPORTANCIA:
Dios juzga el pecado con severidad porque Él es santo. El peregrinaje en el
desierto demuestra cuán seriamente Dios considera la flagrante desobediencia a
sus mandatos. Limpiar nuestras vidas de pecado es vital para los propósitos de
Dios.
Rebelión
EXPLICACIÓN:
En Cades, doce espías fueron enviados a la tierra de Canaán para ver cómo eran
las fortificaciones de los enemigos. Cuando los espías regresaron, diez de
ellos dijeron que debían rendirse y regresar a Egipto. Como resultado de ese
informe, el pueblo se negó a entrar en la tierra. Al enfrentar esa decisión,
Israel se rebeló contra Dios. La rebelión no comenzó con una sublevación, sino
con murmuración contra Moisés y Dios.
IMPORTANCIA:
La rebelión contra Dios es siempre un asunto muy serio. No es algo que se pueda
tomar a la ligera, ya que el castigo de Dios para el pecado por lo general es
muy severo. Nuestra rebelión no siempre comienza con una guerra extrema, sino
en formas sutiles: con murmuraciones y críticas. Asegúrese de que sus
comentarios negativos no sean el resultado de un espíritu rebelde.
Libro de Números
Los hebreos llamaban a este libro wa-yedabber (y habló), según la palabra
inicial del libro, o ba-midbar (en el desierto), según la quinta palabra. El
título “Números” le fue dado por la LXX (arithmói) debido al doble censo del
pueblo de Israel que se describe en los caps. 1-3 y 26.
Continúa el relato de la peregrinación,
desde el segundo mes del segundo año del éxodo hasta el undécimo mes del año
40. En los 38 años intermedios, el pueblo, habiendo partido desde el Sinaí y
habiendo sufrido muchas peripecias en su viaje a causa de su rebelión en Cades,
llega a las llanuras de Moab y los confines de Canaán. Este relato histórico es
interrumpido a menudo por extensos pasajes referentes a la legislación, y
termina con las prescripciones acerca de la ocupación y repartición de Canaán.
I.
SECCIONES
Y DIVISIONES
Este
relato de la segunda etapa del viaje de Egipto a Canaán, e.d. desde el Sinaí
hasta la tierra de promisión, puede dividirse en dos grandes secciones: (1) el
viaje desde el Sinaí hasta Moab (caps. 1-21) y (2) los acontecimientos de las
llanuras de Moab (caps. 22-36). Analizando estas partes principales obtendremos
las siguientes divisiones.
1. Los preparativos para la partida
desde el Sinaí (1:1-10:10). Comprenden un censo del pueblo, la purificación del
campamento, los últimos acontecimientos en el Sinaí y los reglamentos para
marchar y acampar, determinados por la nube de la presencia de Dios y los
toques de clarín que daban la señal de partida.
2. El viaje desde el Sinaí hasta
Moab (10:11-21:35). En el camino entre Sinaí y Moab ocurren cosas
trascendentales como en el envío de los doce exploradores y la rebelión del pueblo
de Cades, castigada con 38 años de peregrinación. Al final de esta última, una
nueva generación llega a los límites de Canaán.
3. La fabricación de la serpiente
de bronce, el envío de Balaam y su vaticino favorable a Israel, y la idolatría
de los israelitas seducidos por los madianitas (caps. 22:25).
4. Prescripciones para la conquista y repartición
de Canaán (caps. 26-36) antes de tomar Transjordania se realiza un nuevo censo
y Josué es instituido sucesor de Moisés. Luego se reparte la Transjordania entre
las tribus de Rubén, Gad y la media tribu de Manasés y se establecen los
reglamentos que deben ser observados cuando sea conquistada y repartida la
tierra de Canaán, al otro lado del Jordán.
II.
ALGUNOS
PASAJES DISPUTADOS
El
término “allende el Jordán” en el texto original (22:1; 32:19; 34:15) puede
significar “de esta parte del Jordán” o “al otro lado del Jordán”. Si se acepta
como correcta solamente la segunda, la descripción de os llanos de Moab en lo
que hoy es Transjordania, situados “al otro lado del Jordán”, ubicaría al autor
de este término en la ribera occidental del rio, y éste no podría ser Moisés
que nunca estuvo en esa región. Sería entonces un indicio de que el autor del
relato no fue Moisés sino un personaje diferente y probablemente posterior. Pero
de la comparación de Nm. 32:19 con 34:15 resulta que el término en cuestión puede
significar también “de esta parte del Jordán”, y ciertos detalles demuestran
claramente que el autor conocía la situación exacta en cada caso.
Nm.
4:3 y 8:24 establecen de un modo aparentemente contradictorio la edad con que
los levitas podían entrar al servicio del tabernáculo: el primer pasaje
establece 30 años mientras que el
segundo permite servir a la edad de 25 años. Según Esd. 3:8 tal condición se
redujo después del cautiverio a 20 años. La diferencia, entonces, entre Nm. 4:3
y 8:24 se debe probablemente al cambio de situación; el primer pasaje a de
referirse al tiempo de la peregrinación en el desierto, y el segundo al tiempo posterior
cuando el tabernáculo había sido colocado en un lugar permanente. Moisés mismo
pudo haber introducido la modificación.
La escasez
de agua, repetida varias veces, no debe extrañar en un desierto, como tampoco
la respectiva intervención divina que en varias ocasiones puso término a tal situación.
Ambos elementos hablan de un solo hecho, y no deben tomarse como variantes. De una
manera análoga Jesús repetía a veces un mismo milagro (alimentación milagrosa
de los 5.000 hombres y luego 4.000 hombres). Mateo establece en 16:9,10 los dos
casos semejantes como hechos concretos.
III.
IMPORTANCIA
DEL LIBRO
En
N. se destacan la soberanía de Dios, su santidad y su demanda de obediencia,
pero también su misericordia y su fidelidad a la alianza. También se ve un
significado tipológico en varios sucesos, personas y leyes de N. (1 Co.10:5ss.;
Heb. 3:7ss.; 9:13). El NT se refiere en varias ocasiones a diversos pasajes de
N. Compárese 21:8ss. Con Jn. 3:14ss.; 28:9s. Con 2 P. 2:15ss. Y Ap. 2:14.
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